viernes, 27 de abril de 2007

UN CHELO EN LOS ESCOMBROS

¿Como suena el cemento cayendo?, ¿qué se escucha cuándo un muro de silencio va derrumbándose? Suena a gritos de alegría, a cánticos patriotas, pero también a un chelo tocando música de Bach. La noche del jueves 9 de noviembre de 1989, el muro de Berlín caía entre las manos de los habitantes de ambos lados de Alemania, que celebraban el acontecimiento más feliz de los alemanes en el siglo 20. Entre las risas y los festejos, un ruso, ferviente opositor del régimen soviético, hizo resonar con su chelo algunas suites de Bach, sentado justo en el Check Point Charly, la garita más famosa para cruzar entre los dos berlines. Era Mstislav Leopoldovich Rostropovich, quien falleció el 27 de abril a los 80 años, unos días después de Boris Yeltzin, su amigo y colega de visiones anticomunistas. Para muchos Rostropovich fue el mejor chelista, equiparable con Pablo Casals, incluso mejor; no lo conozco tanto, pero su vida difícil, el exilio, la defensa por la libertad cultural y su enfrentamiento a un régimen seguramente hicieron su obra más grande. Refuerza mi teoría de que los mejores artistas se dan en las peores situaciones. ¿Será que en México estamos por ver de nuevo una gran generación de artistas o seguimos viviendo en la tibieza?

2 comentarios:

Beatriz dijo...

Y ¿quién diablos es Rostropovich?quedó sin funcionar, pero al menos ya sé algo del tipo.

¿Viviendo en la tibieza? no sé tú, pero aquí estamos a 38 grados.

Anónimo dijo...

Que persona eres como te atreves a decir eso....con solo eso no eres digna para saberlo eres una verguenza para la humanidad